En los últimos año, la ansiedad se ha ido convirtiendo en una epidemia en España. La pandemia del COVID-19 no ha hecho más que acrecentar este problema. Según el Ministerio de Sanidad, el 6,7 % de la población adulta en España refiere ansiedad crónica. Esta amenaza para la salud pública requiere una solución que pasa por identificar correctamente los síntomas de la ansiedad para poder diagnosticarla y tratarla.
¿Por qué la ansiedad es un problema?
En primer lugar, hemos de saber diferenciar qué es la ansiedad y por qué puede convertirse en un problema. No es lo mismo estar nervioso antes de un examen que sufrir un trastorno de la salud mental. Por un lado, los nervios o el miedo racional son un mecanismo defensivo que ha permitido al ser humano evolucionar y sobrevivir. Cierto nivel de nerviosismo previo a situaciones peligrosas activa nuestros sentidos y nos prepara para afrontar retos. Pero cuando la ansiedad se convierte en algo insostenible y no nos permite desarrollar nuestra vida de la forma que nos gustaría, puede que nos estemos enfrentando a un trastorno que debe ser tratado.
Los síntomas de la ansiedad más comunes
Existen muchos síntomas asociados a la ansiedad. No obstante, podemos destacar los más comunes tanto a nivel psicológico como físico.
Síntomas psicológicos
- Anticipación excesiva y preocupación persistente por los planes futuros y su posible impacto negativo en nuestra vida.
- Planteamiento de situaciones hipotéticas catastróficas o desproporcionadas.
- Sentir una continua sensación de peligro y miedo ante situaciones relativamente inofensivas.
- Miedo a tener que tomar decisiones de importancia variable y a lidiar con la incertidumbre.
- Estados de mente en blanco y dificultad para fijar la concentración.
- Apatía asociada a los efectos de la ansiedad sobre nuestra vida.
- Sensación de muerte o peligro inminente.
Síntomas físicos
- Somnolencia o insomnio.
- Fatiga crónica e irritabilidad.
- Ataques de pánico.
- Dolores articulares y musculares.
- Sudoración.
- Náuseas y otros problemas gastrointestinales.
- Palpitaciones.
- Hiperventilación.
Todos estos síntomas (entre otros muchos) pueden llevarnos a situaciones en las que sintamos una profunda desazón. Este sentimiento, unido a una falta de educación sobre la salud mental y, a veces, la incomprensión por parte de la familia y amistades, puede hacer que la ansiedad desencadene otros trastornos de la salud mental como la depresión.
Por ello, es importante que, desde el principio, entendamos que este problema es habitual. Y también debemos saber que existen muchas herramientas que nos ayudarán a suavizar los síntomas de la ansiedad. En el Centro Cemi ofrecemos numerosos servicios para mejorar tu bienestar emocional. Una buena salud mental es imprescindible para tener una vida plena. Así pues, te invitamos a visitar nuestra web y consultar en profundidad nuestros servicios. La primera entrevista de media hora es gratuita.
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